De esta manera, unificó criterios de aplicación en toda la provincia sobre “qué causas quedan comprendidas en dicho sistema de juzgamiento”, con el objetivo de lograr “una mejor y más eficiente implementación del nuevo procedimiento”.
Los delitos cometidos hasta el jueves 28 de febrero, aunque el pedido de debate se realice luego de esa fecha, se juzgarán con el sistema tradicional.
El Poder Judicial viene trabajando fuertemente para la implementación. En primer término, a través de un amplio cronograma de formación, a través de la Escuela de Capacitación Judicial. Además de los cursos, seminarios y prácticas con los operadores del sistema, se realizó un simulacro integral en Viedma y se repetirá esta semana en Bariloche.
Además, avanza en las obras de adecuación edilicia en las cuatro circunscripciones. También, a través de la Oficina Judicial, se encuentra en la última etapa de depuración de los potenciales jurados populares, tomando como base el sorteo público de finales del año pasado.
Los jurados populares brindarán su veredicto en aquellos delitos cuya pena prevista sea de 12 años de prisión o más. Pueden integrar los jurados solo aquellas personas argentinas, mayores de 18 años, que vivan en la zona donde ocurrió el delito. No pueden quienes tengan condenas por delitos dolosos, quienes sean abogados, funcionarios públicos, auxiliares de justicia, miembros activos de seguridad o referentes religiosos.
No es necesario saber de Derecho. Al inicio del juicio, de modo simple, un juez explicará al jurado los aspectos jurídicos del caso. Los ciudadanos darán su veredicto basándose en todo lo que vieron y escucharon durante el juicio, guiados por su buena fe y sentido común.
Tras el debate, el jurado discutirá en una sesión absolutamente secreta. En todo momento estará resguardada la tranquilidad de la totalidad de los miembros, que pondrán pedir un régimen de resguardo.