La sentencia fue confirmada el año pasado por el STJ. En ese fallo quedó expresado que la cámara Gesell con el relato de la niña fue “absolutamente creíble” y que además los testimonios obtenidos en el debate fueron correctamente valorados por los jueces.
“En virtud de lo expuesto, es dable concluir que no se verifica un perjuicio para la parte recurrente, lo que se suma a la circunstancia de que tampoco demuestra en el recurso la falta de razonabilidad de los parámetros ponderados (entre los que se destacó la reiteración en el tiempo y la especial vulnerabilidad de la víctima debida a su edad y aprovechada por el autor), ni acredita que el monto determinado sea excesivo ni desproporcionado en relación con las constancias del expediente, las que han sido valoradas mediante una motivación suficiente”, dice la sentencia que rechazó la queja por casación denegada.
Con posterioridad, la defensa interpuso un recurso extraordinario federal que tampoco prosperó. Como última instancia, el condenado podría presentar una queja ante la Corte Suprema.