La mujer, de 41 años, se trasladaba de lunes a viernes desde Fernández Oro a Cipolletti, donde tenía su trabajo. Se bajaba de colectivo en la parada de las calles 9 de Julio e Italia y caminaba hasta Teniente Ibáñez.
Habitualmente realizaba ese recorrido entre las 7 y las 7:30 de la mañana. El día del hecho fue sorprendida por un perro que la atacó por atrás en inmediaciones de la avenida Alem. Además de morderla le provocó una brusca caída.
La pericia médica que se hizo durante el trámite judicial arrojó un porcentaje de incapacidad del 9,04% y en función de esa información un fallo le ordenó a la ART a indemnizar a la trabajadora por la suma de 85.257,96 pesos más intereses.
El episodio fue considerado un accidente “in itinere”. La Ley de Contrato de Trabajo recepta además de los accidentes y enfermedades profesionales, los accidentes “in itinere” que son los que ocurren en el trayecto que va desde el domicilio del trabajador hasta su puesto de trabajo o viceversa.