La situación ocurrió el 5 de enero de 2016, a las 20:40 horas. En la oportunidad la víctima circulaba a bordo de su motocicleta marca "Honda", modelo "Tornado 250" por calle Salta subiendo en dirección a calle Paso. En la misma ocasión se desplazaba un móvil de la policía de Río Negro, a cargo de un oficial, por calle Salta en dirección hacia la avenida San Martín. Este móvil - y de acuerdo a lo investigado en el fuero penal- había recibido una notificación radial de un operativo de persecución de un moto-vehículo, por lo que al cruzarse con el demandante le dieron la voz de alto e inmediatamente el oficial a cargo, cumpliendo función de escopetero, utilizó en forma antirreglamentaria el arma que portaba -escopeta tipo Ithaca calibre 12/70 - y efectuó 2 disparos intimidatorios para detener la marcha . Como no se detuvo, el oficial de policía le apuntó y disparó a quemarropa con la escopeta un cartucho con postas de goma, impactando las mismas en la zona de la espalda del muchacho, provocando heridas. El disparo se realizó desde 2,4 y 3 metros de distancia, lo que provocó su caída. Luego, ya inmovilizado, fue golpeado. En sede penal las lesiones fueron calificadas como graves.
Luego de todo el despliegue policial, advirtieron que la persona demorada no era la que estaban buscando. Por ello en su demanda la persona afectada consideró que el accionar policial fue negligente, desmedido y abusivo, en violación a las normas que regulan la intervención policial. Por otro lado destacó que las lesiones provocadas fueron graves y fue necesario su internación en el hospital .
Fundamentos del fallo:
El juez ha considerado en primer término que el oficial que tuvo a cargo el operativo mencionado fue declarado penalmente responsable del delito de lesiones agravadas por el empleo de arma de fuego y con abuso de la función por su condición de integrante de la fuerza policial rionegrina, hecho por el que se lo condenó, por mayoría, a la pena de 4 años de prisión, accesorias legales y costas e inhabilitación especial para ejercer cualquier cargo público por 5 años. Luego, en fecha fecha 21/10/2020, el Tribunal de Impugnación hizo lugar a un planteo de impugnación de la sentencia y revocó la misma, aunque solo en lo que respecta a la reducción y forma de cumplimiento de la condena, imponiendo una pena de tres años de prisión condicional, anulando la inhabilitación especial. No obstante, dice el fallo " la condena se mantuvo por lo que el hecho imputado debe tenerse por acreditado, esto es, que el oficial cumplía funciones de escopetero al momento del hecho y que, en ejercicio de tales funciones, la modalidad mediante la cual utilizó el arma devino excesiva y por ende, antirreglamentaria".
Asimismo se recordó que la persona afectada fue sobreseído en relación al delito de atentado y resistencia a la autoridad.
Con toda la prueba el juez en lo Civil Mariano Castro fijó una indemnización con el capital que asciende a más de dos millones y medio de pesos, más sus intereses. La sentencia es de primera instancia y no está firme porque puede ser apelada. Los condenados fueron el policía Maximiliano Javier Chamorro y la Provincia de Río Negro.