El negocio parecía ideal, incluso el gestor de la concesionaria neuquina se comprometió a inscribir la moto sin cargo ante el Registro de la Propiedad Automotor de Cipolletti, donde vive el cliente. La compra se hizo a mediados de abril pero cuando el hombre recibió los papeles se sorprendió al descubrirse casado con una joven mujer desconocida. En los hechos compartía el 50 por ciento de la titularidad de la moto con su cónyuge ya que se trataba de un bien ganancial.
En ese contexto el motociclista debió afrontar una serie de trámites administrativos para probar su soltería. No es un asunto sencillo puesto que la normativa de la propiedad del automotor mantiene un criterio restrictivo para rectificar datos en los casos de matrimonio. Lo que se pretende es evitar cualquier maniobra que pueda llegar a afectar la comunidad de ganancias. En otras palabras, no es fácil transferir el ciento por ciento de la titularidad de un vehículo cuando está registrado dentro de un matrimonio.
Dice el artículo 6 del Digesto de la Propiedad del Automotor: "no se dará curso al pedido de rectificación cuando el titular o la parte cuyo estado civil se pretenda rectificar figure inscripto como de estado civil casado y peticione la rectificación por la de soltero aduciendo que éste es en realidad su verdadero estado civil, salvo que presente oficio o testimonio judicial suficiente”.
Ante esta situación, el dueño de la moto tuvo que recurrir al Registro Nacional de las Personas, organismo que el 10 de mayo certificó que el ciudadano “se encuentra informado como de estado civil soltero, no habiéndose informado rectificación ni modificación del estado civil hasta el día de la fecha del otorgamiento del informe”.
Con esa constancia se presentó ante juzgado de Paz de Cipolletti quién aprobó la información sumaria rendida en el trámite y ratificó su estado civil como soltero. Recién con la sentencia del juzgado de Paz pudo rectificar el título de su moto.