La profunda reformulación de estructura y funcionamiento fue presentada al Colegio de Abogados, en un acto que contó con la presencia del presidente del STJ, Enrique Mansilla, la vocal del máximo tribunal y responsable de la unidad de planificación del Fuero de Familia del Plan Estratégico, Liliana Piccinini, el Procurador Jorge Crespo, las juezas Marcela Pájaro y Marcela Trillini, la presidenta del Colegio de Abogados de Bariloche, Yanina Sánchez, y un muy buen marco de público.
La reforma, además, prevé una respuesta inmediata en determinadas tareas, a través de la creación de la Oficina de Tramitación Integral del Fuero de Familia (OTIF). Esta única oficina prestará servicio a todas las Unidades Procesales, que es la denominación que adquieren los antiguos juzgados a partir de esta reforma. Se evita, de esta manera, la duplicación de estructuras para las mismas tareas.
La OTIF será el ámbito de atención al público. Una de sus áreas internas será la de Receptoría, siendo el punto de inicio de la actuación, centralizando las comunicaciones electrónicas de todos los organismos y está encargada de la carga de datos del Código de Buenas Prácticas, esencial para la construcción de estadísticas confiables.
Los Juzgados, ya sin el peso de estas tareas, se reducen en cantidad de personal y se denominarán Unidades Procesales, concentrándose en la tarea jurisdiccional y de resolución de conflictos.
Plan Estratégico
La prueba piloto es una de las novedades centrales que el fuero de Familia tendrá este año. Otra, será la continuidad del trabajo para elaborar un proyecto de reforma de la Ley Procesal. Ambas iniciativas forman parte de los trabajos del Plan Estratégico Consensuado que impulsa del Superior Tribunal de Justicia.
Cada uno de los jueces del STJ encabeza un área de planificación. Los proyectos de mejora del Fuero de Familia están a cargo de la vocal del máximo tribunal, Liliana Piccinini. En el caso de esta prueba piloto para Bariloche, tuvo una activa participación de las juezas Marcela Pájaro y Marcela Trillini, las secretarias Cecilia Wiesztort y Mariana Lopez Haelterman y personal de los juzgados.
El Centro de Planificación Estratégica, dependientes del STJ, fue el encargado de aglutinar y sumar ideas. Además, elaboró el informe definitivo que aprobó el máximo tribunal. Allí se da cuenta de las estadísticas que sustentan la necesidad de una nueva estructura innovadora de organización del Fuero de Familia.
En primer término, existe un “incremento de la demanda” y un crecimiento de la litigiosidad en el ámbito de Familia. En el periodo 2007-2017 “hubo un aumento del 72 por ciento en los ingresos al Fuero de Familia en toda la provincia”. El año pasado se superaron las 12 mil causas.
Las denuncias ingresadas en el marco de la Ley 3040, de violencia familiar, registran de 2006 a 2017 un incremento del 495%. Más de 5600 se formularon el año pasado, marcando un récord.
Esta demanda ya motivó la adopción de distintas medidas por parte el STJ. La más reciente es la duplicación de las Secretarías en todos los Juzgados de la Provincia. En Bariloche, la suma de una tercera jueza de Familia también colaborará.
En el documento del Centro de Planificación también se refleja un diagnóstico con las debilidades actuales: “el sistema actual de Juzgado combina las actividades administrativas y jurisdiccionales, generando un inadecuado uso de los recursos humanos de los organismos. El titular del mismo dedica parte de su tiempo a ordenar la tarea administrativa en desmedro de la jurisdiccional”. Además, “cada organismo genera su propia forma de trabajo”. Destaca que en la práctica existe “duplicación de tareas y recursos”.
El acto
El auditorio del Colegio de Abogados completo escuchó las palabras del presidente del STJ, quien destacó el proyecto y el trabajo de planificación de las juezas y los equipos de trabajo, luego a la vocal del STJ, Liliana Piccinini, que dio el marco de las iniciativas impulsadas en el Fuero de Familia, le siguió la presentación del Director del Centro de Planificación Estratégica, Alfredo Bozzetti y la explicación de las juezas de familia que trabajaron en el nuevo paradigma.