Se probó en el juicio que tramitó ante la Cámara Laboral de Cipolletti que el trabajador ingresó en 2005 al Sanatorio del Sindicato de Industrias químicas y afines de Cinco Saltos. Después de ganar experiencia pasó al sector de quirófano y durante varios años realizó guardias activas y pasivas.
El día del incidente vial asistía a una cesárea programada, pero chocó con su auto entre Neuquén y Cinco Saltos. Terminó con fracturas múltiples en todo su cuerpo, las más graves en el cráneo.
Estuvo más de dos meses internado, aunque no percibió ninguna suma dineraria por falta de pago de las primas correspondientes por parte del sindicato, que era su empleador. Como consecuencia no contó con cobertura asegurativa en los términos y alcances legales del régimen laboral.
La sentencia de la Cámara Laboral fijó una indemnización cercana al millón y medio de pesos más los intereses. Y condenó tanto al sanatorio como al sindicato a pagarle al enfermero las diferencias salariales adeudadas, diferencias adeudadas por prestación dineraria de Incapacidad Laboral Temporaria, compensación adicional de pago único, indemnización por incapacidad laboral total permanente y definitiva derivada de un accidente de trabajo in itinere, prestación por Gran Invalidez, y gastos médico-farmacéuticos acreditados.
Los gastos del juicio también deberán ser afrontados por parte del sindicato.