La alternativa de la “silla salvaescalera” fue escogida por decisión del Tribunal de Superintendencia de la Cuarta Circunscripción, que preside la vocal del STJ y jueza delegada, Liliana Piccinini.
Como el inmueble no posee ascensor y el Centro de Atención de la Defensa Pública (CADEP) funciona en el primer piso, se instaló este sistema como una solución para las personas con movilidad reducida.
El Tribunal de Superintendencia, con el asesoramiento técnico y evaluando alternativas, tuvo en cuenta que se trata de una alternativa para edificios que no poseen elevadores, ya que se instala con relativa facilidad en las escaleras existentes. El edificio es el primero en el ámbito judicial que cuenta con este servicio que puede ser utilizado por agentes del Poder Judicial y la ciudadanía en general.
En agosto también se habilitó el ascensor para acceder al primer piso del edificio del fuero penal de Cipolletti, sito en España y Urquiza. Allí funcionan tres salas de audiencias. Ese inmueble también carecía de algún medio de elevación y cuando se diseñaron las obras necesarias para la Reforma Procesal Penal se incorporó la instalación del ascensor.
El edificio de Roca 870 que alberga a la Cámara Civil y a la Cámara Laboral también cuenta con un ascensor.